boletín 1020

Intervención para estudiantes de bachillerato en línea con espectro autista

Junio 20, 2025243

De los más de 650 mil estudiantes inscritos en Estados Unidos en un bachillerato en línea, el 10% presenta alguna discapacidad y se estima, de acuerdo con la Oficina de Programas Especiales, que el 11% cuenta con un diagnóstico de espectro autista. Para ellos, la modalidad en línea puede ser desafiante, en tanto que los docentes no pueden aportar señales físicas que les permitan responder adecuadamente. Debido a estos desafíos, es relevante la enseñanza de habilidades de autogestión para que este alumnado logre participar más y tener mayor éxito.

Existe una amplia literatura sobre la efectividad de programas que promueven las habilidades de autogestión. Se han obtenido resultados positivos en cuanto a habilidades académicas, de vida diaria, sociales y comunicativas y para mantenerse en la tarea. En el caso de poblaciones con espectro autista también existe evidencia en la literatura con relación a cuestiones como reducción de agresión, berrinches, auto-lesión y vocalizaciones inapropiadas. En un entorno en línea puede ser difícil que estos estudiantes sigan una lección por más de algunos minutos, o que completen las tareas, debido a su falta de habilidades organizativas. Por otra parte, la falta de estructura y predictibilidad de las actividades puede generarles estrés. En ocasiones, se tiene un apoyo externo para facilitar su paso por estas experiencias. En general, estos alumnos presentan peores desempeños que sus contrapartes. Una posible solución es el uso de intervenciones como CICO (Check in - Check out).

Se trata de una intervención muy utilizada en estudiantes que no responden a los apoyos generales. Tiene los siguientes elementos:

  1. Cada mañana, el estudiante ve a su mentor para hacer su check-in. El mentor revisa las expectativas conductuales del estudiante, fija una meta lograble y aporta al estudiante un informe diario de progreso (IDP).
  2. El estudiante solicita a sus maestros una retroalimentación para su IDP. Cada docente la registra y da reconocimiento si se desempeñó bien.
  3. Al final de la jornada, el estudiante hace check-out con su mentor quien revisa el IDP, reconoce sus logros y le aporta reforzamiento si logró su meta.
  4. El estudiante lleva su IDP a casa para que los padres lo revisen con él y lo firmen y, en su caso, aporten reconocimiento por lo logrado. El estudiante lo entrega al día siguiente a su mentor.

CICO ha demostrado ser efectivo en primaria, secundaria y bachillerato. También ha sido exitoso en otros entornos, como centros de readaptación juvenil o residenciales. Sin embargo, no hay evidencia con estudiantes de programas en línea, quizás por la falta de contacto físico con asesores a distancia. Si bien los padres de familia podrían tomar la responsabilidad (práctica validada desde hace más de 50 años), esto resulta difícil por la atención que requieren otros hijos o por la limitación de tiempo debido a su horario laboral. También puede suceder que no cuenten con las habilidades para dar un apoyo efectivo. Sin embargo, es posible introducir intervenciones e instrucción apoyadas por tecnología.

Solo encontraron dos estudios donde los padres de familia implementaron este tipo de intervenciones usando CICO, uno con éxito y otro con resultados parcialmente positivos. El estudio reseñado de Mallory y Hampshire busca contribuir a esta base de conocimiento.

Trabajaron con tres estudiantes diagnosticados con espectro autista, que estudiaban en línea y enfrentaban desafíos al hacerlo. Los tres tenían dispositivos y exhibían habilidades tecnológicas para usar diversas aplicaciones y funcionalidades. Utilizaron el programa CICO adaptado al entorno en línea. Los papás también debían cumplir con ciertos requisitos: poder participar en una capacitación inicial, estar dispuestos a contribuir a través de sesiones de consejería con el investigador, colaborar en cuatro entrevistas, además de contar con dispositivos y tener habilidades tecnológicas para manejarlos.

Los tres estudiantes demostraron un cambio inmediato de conducta y mejoraron su porcentaje de tiempo dedicado a las tareas que debían realizar, en contraste con su línea base previa a la intervención. Además, los papás pudieron implementar el programa con altos niveles de fidelidad después de sus sesiones de capacitación. Así, los resultados sugieren que CICO puede ser viable y útil para población que estudia en línea y presenta un diagnóstico de espectro autista cuando se cuenta con una familia que se adhiere al programa.

Mallory, P.J. y Hampshire, P.K. (2025). Fostering autonomy: A technology-aided check in-out intervention for online high school students with autism. Journal of Special Educational Technology,, 40(1). 13-27. DOI: 10.1177/01626434241257200